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Convención 1295

La mirada de Mario

Convención 1295

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Después de vivir veintisiete años en el barrio de Malvín, Mario Benedetti se muda a la calle Convención 1295, donde estará hasta verse obligado a exiliarse en 1974.

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SALUTACIÓN DEL OPTIMISTA - POEMAS DE OTROS

En 1905 Rubén Darío compuso, espoleado por unos amigos, un poema titulado «Salutación del optimista»; un saludo en forma de discurso que el nicaragüense pronunció ante el Ateneo de Madrid, en ocasión de un encuentro literario hispanoamericano. El contenido de esos versos era un entusiasta agradecimiento que llamaba a la confraternidad y prosperidad entre España e Hispanoamérica. Parafraseando irónicamente el título de Darío, Mario escribe su propia salutación, también «a instancia de mis amigos cuerdos y cautelosos», tal cual declara el primer verso. El título y el haber sido empujado a escribir el poema son las dos únicas circuntancias comunes entre un poema y otro. Darío saluda a España en un lenguaje pomposo y rimbombante, Mario al doloroso exilio con la palabra cotidiana. Mientras Darío -como lo anuncia el título-, rezuma buen ánimo y esperanza, Mario enumera todo aquello que no le permite ser optimista: verse obligado a dejar su casa, las sirenas en las calles, los militares asesinando a sus hermanos, los calabozos, los jóvenes torturados por sus ideas, los mendigos, y el prójimo que quedaba con aquel oscuro panorama.

«allá en el paisito quedó mi casa
con mi gente mis libros y mi aire
desde sus ventanas grandes conmovedoras
se ven otras ventanas y otras gentes» 1

Publicado en 1974 en Buenos Aires, Poemas de otros es uno de los poemarios fundamentales de Mario, con la herida del destierro recién abierta, fresca, aún sangrando. Si el amor está presente en toda la obra de Mario, en este libro es la materia prima con la que están compuestos los poemas; el amor no sólo en sentido romántico, sino en todas sus formas posibles, incluso la política, que para Mario era otra forma de amor. Contiene la serie «Hombre que mira...»; los poemas que atribuye a los personajes de La Tregua, entre los que se cuenta «Táctica y estrategia»; las Canciones de amor y desamor, entre las que están «No te salves», «Te quiero», «Hagamos un trato» y «Chau número tres»; y la sección «De otros diluvios», de donde procede «Los formales y el frío». En 1975 volvió a editarse en Argentina y más tarde en México (1977), en 1979 en Colombia -en edición no autorizada-, en 1999 en España, y en 2010 vuelve a aparecer en Argentina, publicado por el prestigioso diario Página/12 en un mismo volumen junto a Cotidianas.


1- Salutación del optimista, en Poemas de otros, Inventario I, pág. 337

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Mario

1974

El 27 de junio de 1973 el presidente Bordaberry disuelve el Parlamento y queda instaurada la dictadura en el país. Progresivamente se suspenden libertades, se clausuran medios de comunicación, se disuelven los sindicatos y se interviene la Universidad de la República, todo en medio de violentas represiones. A la par, son arrestados dirigentes políticos, sindicales y estudiantiles, militantes y personas que pudieran despertar alguna sospecha: vale decir, cualquiera.

Bastaba figurar en la agenda de cualquier sospechoso para adquirir idéntica jerarquía. Mario viaja a Buenos Aires, pero precisamente está en la agenda de un dirigente detenido, y automáticamente se convierte en «requerido»; el 31 de diciembre de ese año vuelve a Montevideo a declarar ante los militares. Finalmente, con la mayor discreción posible, el 1º de enero de 1974 deja definitivamente su casa de la calle Convención para instalarse primero en Buenos Aires, donde el ambiente ya estaba caldeándose también, pero todavía no tanto como en Uruguay: haberse quedado, hubiera significado con seguridad la cárcel, la tortura y, con su asma, seguramente la muerte.

Así fue que, en una situación de mucha precariedad, casi sin equipaje y sin dinero, cruza el Río de la Plata, es hospedado por amigos y se revuelve escribiendo para editoriales pequeñas. Pero Buenos Aires no es una plaza segura para él y para nadie: la censura, la persecución política y la impunidad con la que ya estaban operando los grupos paramilitares convertían aquella ciudad en un lugar tan peligroso como Montevideo.

No obstante, en ese breve lapso 1973-1974, varias de sus obras ven la luz allí mismo: Terremoto y después -que recoge crónicas y artículos contra la dictadura-, los poemarios Letras de emergencia y el fundamental Poemas de otros,y los ensayos El escritor latinoamericano y la revolución posible, y Daniel Viglietti, una semblanza sobre su amigo músico que no alcanza a biografía. El contexto en que fueron publicadas hará que algunas de estas obras cobren trascendencia especial.

Mario estará poco tiempo en Buenos Aires: a finales de 1974 los paramilitares lo incluyen en una lista de sentenciados y le dan 48 horas para abandonar el país. Viaja a Lima, Perú, lo más cercano al Uruguay que aún no presentaba riesgos. Habrá que esperar, además, hasta 1977 para volver a ver una nueva obra publicada.

 

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18 de Julio